Los verbos regulares son verbos que poseen conjugaciones uniformes, y mantienen su raíz, según el tiempo o modo en el que sea conjugado.
Características
Existen tres modelos de conjugaciones verbales agregando el sufijo -ar, -er o -ir.
Los verbos regulares están compuestos de una raíz y un conjunto de morfemas flexivos que establecen la concordancia de número y persona con el sujeto gramatical y expresan las nociones de tiempo, modo y aspecto verbal.
Ejemplos
• Amar
• Beber
• Partir
• Recibir
• Saltar
• Temer